La estafa de Carlos Ruiz Zafón

A lo largo de mi vida he leido algunos libros que me han dejado mal sabor de boca o que, sencillamente, eran malos. No han sido muchos, pero he procurado olvidarlos para siempre. Esta tarde he terminado El juego del ángel, un libro déspota, pretencioso y una tomadura de pelo por parte del que es mi único escritor español favorito. Durante horas y horas, o mejor dicho, páginas y páginas, el escritor nos promete que nos va a contar una historia y al llegar al final descubres que ni hay historia ni explicación a la cantidad de sandeces que suelta. Sandeces, que no lo serían si diese una explicación de éstas; pero como no lo hace, pues eso pasa.

Un libro que te deja mal sabor de boca, que hace que te sientas engañada y con la sensacion de que te han tomado el pelo. He leido finales tristes, finales injustos, pero este ni es triste ni es injusto. Es una gilipollez.

Lamento que mi escritor-español-favorito haya hundido en un pozo demasiado profundo una historia que no ha sabido contar, y como consecuencia, siento que se ha caido del pedestal donde yo misma le subí. No por ello le voy a odiar, no. Es un gran escritor, diga la gente lo que diga. Pero todo buen escritor la caga de vez en cuando. Espero que el siguiente sea mejor.